Con el Santa María Polo Club en su corazón, Sotogrande no es sólo un lugar que ofrece polo – es uno de los principales centros del deporte en el mundo.
Las inmaculadas instalaciones, el ambiente refinado y los numerosos torneos internacionales que se celebran en el Santa María Polo Club de Sotogrande hacen de éste uno de los destinos de polo más prestigiosos de Europa y más allá. Si a esto le añadimos el fantástico entorno de los venerados terrenos a orillas del río Guadiaro, el polo se suma al golf, la vela y la equitación como uno de los glamurosos cimientos sobre los que se construye la fama de este exclusivo destino turístico.
El polo fue traído a Sotogrande en 1965, cuando Enrique Zobel construyó el primer campo – creando en efecto los primeros comienzos de lo que más tarde se convertiría en una destacada instalación de atractivo internacional. El resort había sido creado unos años antes por el Coronel McMicking, quien estableció un refinado club en las fincas rústicas de Paniagua, Valderrama, El Conchudo, Los Canos y La Higuera. Consolidado así en una gran finca, Sotogrande nació como un hermoso tramo de paraíso a lo largo de la costa andaluza.
Los primeros partidos de polo se celebraron en un ambiente informal, con los contornos de Gibraltar y el norte de África como telón de fondo panorámico. En 1971 se celebró por primera vez la famosa Copa de Oro de Sotogrande, la primera de muchas en una larga y distinguida carrera que ayudó a situar este rincón del sur de España en el mapa internacional. Se añadieron más campos e instalaciones, y poco a poco Santa María Polo Club evolucionó con la misma gracia que el propio Sotogrande, fusionándose suavemente con su destacado entorno natural para convertirse en un destino venerado con un ambiente muy especial.
En 1990 las instalaciones habían crecido hasta convertirse en algo realmente impresionante, con una hospitalidad cada vez mejor, establos, servicios veterinarios e incluso programas de cría establecidos en Sotogrande y sus alrededores. El mismo año los torneos de polo de Sotogrande se hicieron profesionales, atrayendo a equipos de toda Europa, América y Oriente Medio. Pronto las marcas de lujo comenzaron a poner su nombre al polo en Sotogrande, ya que ahora era uno de los centros clave de este refinado deporte, y las competiciones que se celebraban aquí iban acompañadas de un escenario social muy elegante que atraía a la realeza, a los aristócratas y a muchos otros rostros famosos.
La temporada de verano de Santa María Polo Club está ahora firmemente situada en el calendario social de la jet-set, ofreciendo una rara oportunidad de disfrutar de la sofisticación clásica y al mismo tiempo en un entorno de insuperable belleza. En total, el club cuenta con nueve canchas en Los Pinos, Río Sotogrande y Puente de Hierro, junto con caballerizas de primera clase en este último. Además del deporte y sus espectadores, el Santa María Polo Club también ofrece excelentes instalaciones para una amplia gama de eventos, que van desde acontecimientos sociales y culturales hasta bodas y eventos corporativos. En este sentido, aprovecha un entorno único, de gran belleza y ambiente, muy demandado tanto en España como en el extranjero.
Los servicios profesionales que se ofrecen incluyen un catering de alta gama a medida, alojamiento de marquetería con estilo, sonido, iluminación y entretenimiento diseñados a medida. Los modernos establos con 39 boxes, las instalaciones de aseo, veterinarias y de entrenamiento de Puente de Hierro son una delicia popular, ofreciendo todo lo que el caballo y el jinete puedan desear. La pista de ejercicio es también de los mejores estándares, lo que se suma a las refinadas credenciales de Valderrama, que combina los placeres de un lujoso balneario con los de una noble finca rústica.
Aunque el foco principal y los eventos más importantes se celebran durante los meses de verano, Sotogrande disfruta de una temporada de polo durante el año entero con eventos que abarcan los 12 meses del año, siendo uno de los centros de polo más importantes del mundo.
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