Estepona no sólo es famoso por ser un encantador pueblo turístico de playa. Es también conocida por su encantador casco antiguo, con paredes encaladas, macetas de cerámica y plantas colgantes.
Y ahora, gracias a los más de 50 murales espectaculares que salpican la ciudad, Estepona ha adoptado una nueva y excitante vibración. Desde que se empezaron a pintar los murales en 2012, la ciudad se ha convertido en un centro de arte urbano, con muchas zonas que se asemejan a un museo al aire libre. Un paseo por los diferentes barrios ofrece un festín de arte, cultura y arquitectura, lo que supone un cambio de aires comparado con tomar el sol en la playa.
La Ruta de Murales es un testimonio del ingenio del ayuntamiento de Estepona. Las antiguas fachadas blancas de hasta 80 metros de altura muestran ahora las obras de los artistas locales, deseosos de expresarse añadiendo arte y color a su ciudad natal.
Hay una gran cantidad de murales para ver, pero uno de los que no hay que perderse es el primer mural «La Venus» (120m²), situado en el museo de arqueología de la ciudad en el antiguo ayuntamiento de la Plaza Blas Infante. La obra es una copia de la figura de 5.000 años de antigüedad de ‘La
Venus de Estepona’, que en realidad sólo tiene unos pocos centímetros de altura. Posiblemente la obra de arte más conocida es el ‘Día de Pesca’, el mural más grande de España, que se extiende sobre seis fachadas paralelas, cubriendo una enorme superficie de 1.000m².
Si está listo para descubrir este fascinante aspecto de Estepona, recoja una guía de la ruta en la Oficina de Turismo de la Plaza de las Flores. Pero tenga en cuenta que toda la Ruta de los Murales dura tres horas, por lo que es muy recomendable llevar zapatos cómodos y hacer frecuentes paradas para tomar tapas y refrescos.
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